Android

Pixel TV. ¿Cuándo tendremos una Android TV actualizado de Google?

Xurxo Freitas Pereira
30 de jul. de 2017
2 min de lectura

Google nunca tiene un único proyecto, por lo que en muchas ocasiones, se ve forzada a repartir el esfuerzo entre distintas plataformas. Aunque Android empezó como sistema operativo para teléfonos inteligentes, ya existen variantes para televisión y para relojes igual de funcionales que un teléfono. ¿Por qué razón Google ha dejado abandonado un poco a Android TV?

Pixel TV es solo un concepto de algo que nos gustaría que existiese. Existen alternativas en el mercado para dotar a nuestro televisor del sistema operativo de Android TV siendo muy populares los dispositivos de Nvidia y Xiaomi, el problema llega cuando Android avanza más rápido de lo que los fabricantes actualizan dichos dispositivos.

En este sentido, comprar cualquier modelo de Android TV es un riesgo para el consumidor. En sistemas más baratos es raro que el fabricante invierta recursos en actualizar su software y en dispositivos de mayor coste, es necesario tener fe ciega en la marca del dispositivo.

 

ROMs como salvación.

Si bien es cierto que el soporte «no oficial» o lo que es lo mismo, el mundo de las ROMs, tiene un papel importante a la hora de dar soporte a algo que los fabricantes han dejado de lado, es necesario comprar un dispositivo ya popular o jugar nuestras cartas y probar suerte.

 

 

Es en este aspecto donde Google tiene su tarea pendiente. Los dispositivos de Google siempre se han caracterizado por tratarse de sistemas que se actualizan durante un periodo de dos años y suelen ser de los primeros en poder probar el último software. Ya que Google quiere sacar adelante el sector de las televisiones inteligentes con su sistema operativo propio, qué mejor manera que sacar al mercado un dispositivo como la Pixel TV que sirva de referencia a la hora de comprar uno de estos accesorios para nuestro televisor para sustituir al viejo Nexus player

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Sin duda en este sector, Google tiene una espina clavada que en el caso de jugar bien su papel, podría repercutir positivamente tanto en los beneficios de la propia Google como en la opinión que tienen sus clientes de la compañía.