Tras la adquisición de Fitbit por parte de Google, la idea de un mundo donde los relojes con Wear OS sean populares parece estar cada vez más lejos en un mundo aparentemente dominado por Xiaomi-Amazfit-Zepp-Huami. Ahora, las cosas se complican un poco más para el sistema operativo de Google, con cambios en lo que a la instalación de apps se refiere.
Hasta ahora las aplicaciones de Android podían contener en su interior otro archivo APK usado por Wear OS. Gracias a esto, podíamos instalar aplicaciones en nuestro reloj inteligente a través de nuestro teléfono. Pues bien, Google ha decidido descontinuar esta función, anunciando como fecha límite el 10 de marzo, lo que le complica las cosas a los poseedores de un smartwatch con Wear OS.
Opciones para desarrolladores.
Aunque el cambio afecta especialmente a los usuarios finales, estos podrán seguir instalando apps desde fuera del Google Play en sus relojes, aunque para ello tendrán que utilizar las herramientas que la plataforma habilita para los desarrolladores. Esto hace que sean menos los usuarios que se atrevan a instalar APKs en sus relojes por los conocimientos necesarios para ello.
Ventajas para el resto de usuarios.
Al igual que si descargamos una app de Internet esta no lleva código para la Xiaomi Mi Band, ahora el resto de aplicaciones no necesitarán código para Wear OS. Esto supone un ahorro de espacio que sigue la línea del Google Play en los últimos tiempos. Recordemos que el formato deseado ahora por Google ya no es el de los APK, en su lugar Google prefiere que los desarrolladores usen “Bundles”, archivos que dan lugar a APKs específicos para cada teléfono.
Obviamente esto tiene su parte negativa. Ahora necesitamos descargar la versión correcta del archivo APK que deseamos instalar o de lo contrario no funcionará.