Google ha anunciado la expansión de sus herramientas de transparencia de contenido a la plataforma móvil Gemini, permitiendo a los usuarios verificar si un vídeo ha sido editado o creado mediante inteligencia artificial desarrollada por la compañía.
¿Cómo funciona esta tecnología?
La verificación se realiza mediante SynthID, una marca de agua digital imperceptible que Google integra en el contenido generado por sus sistemas de IA. Esta tecnología permite rastrear el origen del material audiovisual de manera fiable.
Proceso de verificación simplificado
El proceso es notablemente sencillo:
- El usuario sube un vídeo de hasta 100 MB y 90 segundos de duración
- Realiza una pregunta sencilla como "¿Esto fue generado usando Google AI?"
- Gemini analiza tanto la pista de audio como la visual
- Devuelve una respuesta contextualizada indicando qué segmentos contienen elementos generados por IA
¿Por qué esta herramienta resulta importante?
La proliferación de contenido generado por inteligencia artificial, cada vez más presente en todas las redes sociales desde Facebook a X, ha creado la necesidad urgente de mecanismos que permitan distinguir entre material auténtico y sintético.
En un momento donde la desinformación y los deepfakes representan desafíos significativos para la sociedad digital, herramientas como esta proporcionan una capa adicional de verificación que puede resultar crucial para periodistas, investigadores y ciudadanos comunes.
Es importante destacar que esta tecnología solo detecta contenido generado específicamente con herramientas de Google AI, no abarca todas las plataformas de generación de contenido existentes en el mercado. Google "marca" el contenido que genera y esto es lo que permite a la compañía detectar ese contenido.
Disponibilidad
Google ha confirmado que tanto la verificación de imágenes como de vídeos está disponible en todos los idiomas y países donde la aplicación Gemini tiene presencia, lo que representa un paso significativo hacia la democratización de estas herramientas de transparencia.
Esta expansión refleja el compromiso de las grandes tecnológicas con la implementación de estándares de transparencia en la era de la inteligencia artificial, estableciendo un precedente para otras compañías del sector.