Los Pixel son el producto estrella de Google, representan un avance para la compañía ya que quiere aumentar su imagen de marca diferenciandola de los Nexus aunque, lejos de ser una evolución lógica como nos tenían acostumbrados más bien se han convertido en la línea divisoria entre los antiguos usuarios y los nuevos y privilegiados poseedores de los Pixel. Ya hemos mencionado algunas de las diferencias entre lo que aportarían los Pixel con respecto a los Nexus pero en este caso una de las grandes polémicas transcurrida hace unos días fue que Google no quería incorporar las funciones gestuales del sensor de huellas a los modelos del año pasado, cuando se demostró que tanto los Pixel como el Nexus 6P comparten el mismo sensor. Esta noticia alarmó a los usuarios y creemos que con razón ya que uno de los empleados de Google alegaba que no por tener un mismo sensor de huellas no significa que las capacidades sean las mismas. Esto choca con que algunas aplicaciones de terceros nos permitan hacer justamente eso por lo que parece que en la gran G no les queda otra que admitir su error e intentar contentar a sus usuarios.
«Evaluando la opción»
Con esta frase hemos conocido que Google puede que introduzca mediante actualización las funciones de los Pixel, no es algo seguro pero que lo comuniquen de forma oficial es cuando menos alentador para usuarios de los Nexus. De momento aun no se ha lanzado la versión final de Android 7.1 para los Nexus por lo que hay mucho margen de mejora y más si los usuarios reivindican un mejor trato de la compañía o por lo menos una mayor preocupación.
Últimamente estamos viendo como Google amplía las diferencias entre sus nuevos modelos y los antiguos, puede que sea para diferenciar aún más sus productos pero no está de más que recuerden que el crecimiento en el sector móvil durante estos años vino por cuidar a sus usuarios, es algo que no deben olvidar aunque al menos saben escuchar.