Nuevas restricciones para las extensiones de Google Chrome: No más spam ni apps repetidas
Al igual que Google Play es la fuente de referencia para conseguir apps para el sistema operativo Android, Google tiene otra tienda para todo lo relacionado con Google Chrome. En multitud de ocasiones hemos hablado de cambios en las políticas de Google Play pero en lo respectivo a la tienda de Google Chrome, no han existido cambios radicales. Esto está a punto de cambiar con un intento de Google de hacer más restrictiva su tienda de extensiones.
Google ha anunciado una serie de cambios importantes en las políticas de la Chrome Web Store para combatir el spam y las extensiones basura. Estos cambios, divididos en varias categorías que veremos a continuación, se implementarán desde el próximo 27 de agosto. Hasta entonces los desarrolladores podrán adaptar sus apps para cumplir estos objetivos:
- No se deben publicar múltiples extensiones que ofrezcan la misma función o experiencia. Es algo que existe también en el Google Play para evitar que los desarrolladores suban una misma aplicación con varios nombres para captar usuarios.
- La información de la aplicación tiene que ser correcta y precisa, sin nombres engañosos que traten de engañar al usuario. Tampoco está permitido usar capturas de pantalla o imágenes promocionales engañosos.
- Los desarrolladores no podrán manipular las valoraciones o posicionamiento de sus extensiones como descargas fraudulentas o incentivos.
- No se admiten extensiones cuya única función sea abrir una página web, instalar o iniciar otro componente. Por ejemplo, no podremos crear una extensión que abra Google Fotos y venderla como si fuese un acceso directo a Google Fotos.
- No se permiten extensiones que abusen del sistema de notificaciones para el envío de spam, anuncios, promociones, intentos de phishing o mensajes que traten de engañar al usuario.
Todo depende de la implementación.
Aunque sobre el papel estas normas puedan parecer bastante restrictivas, lo cierto es que todo dependerá de cómo Google las aplique. Si tomamos como ejemplo el Google Play, aplicaciones de las que ya os hablamos como la de Siri para Android nunca deberían de haber llegado al público y mucho menos mantenerse si tenemos en cuenta las propias normas de Google. La realidad es que si nadie aplica dichas normas, este cambio solo se transforma en un falso sentimiento de seguridad para el usuario.