El Redmi 14C se presenta como uno de los teléfonos más asequibles de Xiaomi. Tras haberlo utilizado durante más de dos semanas, la experiencia no ha sido nada alentadora. En esta review completa descubrirás por qué este dispositivo deja tanto que desear y qué alternativas podrían resultar más interesantes. Si estás pensando en comprarlo, te conviene conocer primero sus principales inconvenientes y, por supuesto, sus escasos puntos fuertes.
Diseño
El Redmi 14C se caracteriza por un diseño bastante grande y un peso de 204 gramos. Está construido íntegramente en plástico, algo esperable para un dispositivo de bajo coste. Aun así, conviene destacar algunos detalles:
- Dimensiones: Al ser un móvil voluminoso, no resulta cómodo para manos pequeñas ni para quienes prefieren dispositivos compactos.
- Acabado brillante: La versión en color negro tiende a ensuciarse con facilidad y deja marcadas todas las huellas. Por suerte, Xiaomi incluye una carcasa en la caja que ayuda a mitigar este problema.
- Variedad de colores: Además del negro, se comercializa en otros tres acabados que buscan ofrecer algo de variedad para distintos gustos.
En definitiva, el diseño no deja de ser funcional, pero no esperes una calidad de construcción premium ni un acabado especialmente cuidado.
Pantalla y apartado multimedia
La pantalla del Redmi 14C es de 6,88 pulgadas con tecnología IPS y resolución HD (720p). Presenta 120 Hz de tasa de refresco y un brillo máximo de 450 nits. Sin embargo, hay varios puntos a tener en cuenta:
- Tasa de refresco real: Aunque en los ajustes puedes forzar los 120 Hz, el procesador no es lo suficientemente potente para mantenerlos de forma constante. En la práctica, la mayor parte del tiempo la frecuencia baja a 90 Hz o incluso 60 Hz, sobre todo al abrir aplicaciones.
- Resolución limitada: Por ser un panel HD y de un tamaño considerable, si te acercas mucho, es fácil percibir la falta de nitidez y la presencia de píxeles.
- Brillo justo: Con 450 nits, en exteriores soleados puede que tengas dificultades para ver el contenido de forma clara.
Dentro de lo esperado en la gama baja, el panel cumple para un uso básico, pero si buscas calidad de imagen y fluidez real, este no será tu mejor aliado.
Rendimiento
Bajo el capó, el Redmi 14C monta un procesador MediaTek Helio G81 Ultra de gama baja. Existen variantes de 4, 6 u 8 GB de RAM y opciones de almacenamiento de 128 y 256 GB. No obstante:
- Versión de 4 GB de RAM: Esta configuración, en combinación con la memoria interna de tipo eMMC 5.1, hace que el teléfono sea extremadamente lento. Las aplicaciones tardan en abrir y el sistema parece quedarse atascado con cierta frecuencia.
- Memoria interna lenta: La tecnología eMMC 5.1 es más antigua y ofrece velocidades de lectura/escritura inferiores a las memorias UFS, provocando una apertura de aplicaciones y archivos bastante tediosa.
- Uso recomendado: Para tareas muy sencillas como mensajería, correo electrónico o redes sociales básicas. Si intentas jugar a videojuegos algo más exigentes, te encontrarás con mucho lag y limitaciones gráficas.
Si te planteas comprarlo, resulta fundamental que optes por las versiones con 6 u 8 GB de RAM para tener una experiencia mínimamente decente.
Sistema y Software
Uno de los mayores problemas del Redmi 14C es su software:
- HyperOS 1.0 con Android 14: Aunque promete actualizarse pronto a HyperOS 2.0 con Android 15, la versión actual presenta bugs considerables.
- Falta de optimización: El sistema se cuelga, las aplicaciones se cierran inesperadamente y abrir la cámara puede llegar a ser desesperante por la lentitud y los bloqueos.
- Rendimiento aún más penalizado: Dado que el teléfono ya cuenta con un hardware limitado, un software mal optimizado complica aún más su uso diario.
En pocas palabras, este apartado es el que más afecta a la experiencia global y hace del Redmi 14C un dispositivo poco recomendable.
Batería y Conectividad
Si hay algo en lo que destaca ligeramente este teléfono es en la autonomía:
- Batería: Con 5160 mAh, ofrece un día y medio de uso moderado sin problemas. Incluye carga rápida de 18 W y el cargador viene en la caja.
- Conectividad:
- Doble SIM (4G).
- WiFi, Bluetooth 5.4 y GPS.
- Jack de 3.5 mm para auriculares.
- Sensor de huella dactilar en el lateral derecho.
- Sin NFC: Algo esperable en este rango de precio.
Si no te importa la lentitud del sistema y necesitas un móvil que aguante el día, este es quizá el único aspecto realmente positivo del Redmi 14C.
Cámaras
El Redmi 14C cuenta con:
- Cámara principal: 50 megapíxeles, con resultados aceptables si tenemos en cuenta su bajo precio. No esperes una gran gestión del HDR, pero los resultados pueden ser decentes si las condiciones de luz son favorables.
- Cámara frontal: 13 megapíxeles, suficiente para videollamadas y selfies básicas.
- Grabación de vídeo: La estabilización brilla por su ausencia y la calidad no es sobresaliente, aunque útil para capturar momentos puntuales.
Dentro de su gama, las cámaras cumplen, aunque no destacan de manera especial. Son simplemente correctas para un uso esporádico.
El Redmi 14C se posiciona como uno de los teléfonos más asequibles de Xiaomi. Sin embargo, la suma de un hardware limitado con un software mal optimizado lo convierte en una opción poco recomendable, incluso en el rango de precios por debajo de los 100 dólares. Con solo añadir 30 o 40 dólares más, puedes encontrar dispositivos muy superiores, incluso dentro del mismo catálogo de Xiaomi (por ejemplo, algunos modelos de la línea POCO).
- A favor:
- Excelente autonomía.
- Precio económico.
- Incluye accesorios básicos (carcasa y cargador).
- En contra:
- Rendimiento lento y frustrante.
- Software mal optimizado que produce cierres inesperados y bloqueos.
- Pantalla HD de gran tamaño, donde se percibe la falta de nitidez.
- Sin NFC y con opciones de conectividad básicas.
Si tus necesidades se limitan a un uso ultra básico (mensajería, llamadas, correo y redes sociales ligeras), y la paciencia no es un problema para ti, puede que te sirva. En caso contrario, lo más sensato sería ahorrar un poco más e invertir en un terminal que ofrezca un rendimiento y una experiencia de uso mucho más satisfactorios.