YouTube es la plataforma de videos más popular del mundo, pero con las redes sociales con más fuerza que nunca la plataforma se enfrenta a una fuerte competencia de otros formatos como TikTok e Instagram Reels. Para adaptarse a estas nuevas tendencias, YouTube ya lleva tiempo probando Shorts, una función que permite crear y ver videos de 15 segundos o menos. Sin embargo, ¿qué impacto tiene esto en el negocio principal de YouTube y los videos de larga duración?
El dilema de YouTube entre el formato corto y el largo
Según un informe del Financial Times, YouTube tiene preocupaciones internas sobre que Shorts pueda canibalizar el consumo y la producción de videos de larga duración, que generan más ingresos para la empresa.
Datos internos muestran que los creadores están realizando menos videos de larga duración, favoreciendo otro tipo de contenido más rápido y "barato". Esto afecta a los ingresos publicitarios, ya que los videos más largos permiten más publicidad y una mayor tasa de clics en anuncios. Al igual que los espectadores, los anunciantes también prefieren el contenido de formato corto al encargar colocaciones de productos.
Esto, además ocurre en un momento que parece no ser el mejor para YouTube, el que ha informado de caídas en los ingresos publicitarios en tres de los últimos cuatro trimestres. Quizás el gran cambio para intentar mejorar estos ingresos ya lo vimos hace unas semanas con medidas contra los bloqueadores de anuncios, pero parece que no son suficientes.
Por su parte, YouTube ha declarado que Shorts fue “diseñado para complementar, no competir con todos los demás formatos que los creadores utilizan” en la plataforma, como audio y transmisiones en vivo.
Nuestra opinión
La preocupación de YouTube sobre si los Shorts canibalizarán los videos largos es más real que nunca. Ya se ve en las principales redes sociales, donde la gente se pasa horas y horas viendo vídeos cortos sin apenas valor ni contenido, simplemente movidos por el denominado contenido barato.
YouTube, por su parte tiene que tomar una decisión, continuar promocionando este tipo de contenido para no quedarse atrás e intentar monetizarlo de otras maneras o dar un giro de tuerca a su formato actual para volver a hacerlo atractivo para las masas.
Sea lo que sea y bajo la opinión del escritor de este artículo el contenido corto y fácil de consumir está haciendo daño a muchas personas, en donde se prima la cantidad de horas que el consumidor puede estar delante de la pantalla en contra de su salud física y mental, por lo que un cambio en este aspecto sería agradecido por todos.