Google ha anunciado una importante inyección de capital en Bélgica, con una inversión de 5.000 millones de euros en los próximos dos años. Este movimiento estratégico tiene como objetivo principal expandir la infraestructura de la compañía en la nube (cloud) y en inteligencia artificial (IA) dentro del país.
La inversión se centrará en la ampliación de los centros de datos ya existentes en Saint-Ghislain, así como en la creación de unos 300 puestos de trabajo a tiempo completo. Este desarrollo subraya el compromiso de Google con el crecimiento y la innovación tecnológica en Europa.
Apuesta por la energía renovable
Más allá de la expansión de la infraestructura digital, Google también está poniendo un fuerte énfasis en la sostenibilidad. La compañía ha firmado nuevos acuerdos con empresas energéticas como Eneco, Luminus y Renner.
Estos acuerdos buscan apoyar el desarrollo de nuevos parques eólicos terrestres y, lo que es igual de importante, contribuir a la estabilidad de la red eléctrica mediante el suministro de energía limpia. Esta iniciativa demuestra la visión integral de Google, que no solo busca el avance tecnológico, sino que también se preocupa por el impacto ambiental de sus operaciones así como en sus dispositivos.
Formación y desarrollo de habilidades en IA
Conscientes de la creciente importancia de la IA en la economía actual, Google también está invirtiendo en la formación de la población belga. La compañía ofrecerá formación gratuita en habilidades relacionadas con la IA, con el objetivo de preparar a los ciudadanos para un mercado laboral cada vez más digitalizado.
Además, Google financiará organizaciones sin ánimo de lucro para que ofrezcan formación práctica en IA a trabajadores con baja cualificación. Esta iniciativa busca garantizar que nadie se quede atrás en la transición hacia una economía impulsada por la inteligencia artificial.
La inversión de Google en Bélgica es una clara señal del potencial que la compañía ve en el país como centro de innovación tecnológica. Esta iniciativa no solo impulsará la economía belga, sino que también contribuirá al crecimiento digital y económico de toda Europa. Al invertir en infraestructura, energía renovable y formación en IA, Google está sentando las bases para un futuro más próspero y sostenible para la región.