Parece que Samsung no se está quedando sin ideas, tras haber visto la patente del sensor de huellas en la pantalla con la posibilidad de controles gestuales, la compañía apuesta por un terminal que si bien es algo ambicioso de más, aporta conceptos interesantes.
Como decimos, Samsung ha solicitado una patente para un “dispositivo electrónico de pantalla flexible”. La patente original fue solicitada en octubre de 2016 en Corea y esta acaba de ser aprobada este año, concretamente el 11 de enero de 2018. El terminal que Samsung ha patentado consta de varias posibilidades bastante interesante que vamos a ir explicando.
La primera función busca aprovechar la flexibilidad de la pantalla. El terminal consta de 3 partes, la pantalla y los laterales del terminal que son plegables en diferentes posiciones para poder jugar con varias posiciones diferentes y adaptables. La pantalla del terminal es considerablemente fina, además es el doble de larga que los extremos del terminal, esto posibilita una buena flexibilidad y aunque no se especifica el tipo de pantalla que se incluirá, se apunta o bien por un panel OLED o uno E-ink ya que son pantallas adaptables y de bajo consumo energético. Esta pantalla podrá estirarse para el empleo del terminal en diferentes posiciones como se puede ver en las imágenes y si lo recogemos podremos emplearlo como un smartphone normal. Los extremos del terminal serán partes fijas, por lo que serán las que incorporen el procesador y demás materiales como la batería.
Otra de las posibilidades es el emplear el terminal como reloj inteligente, tanto de muñeca como de mesilla. Esto es posible con mediante las posibilidades que ofrecen sus extremos, estas pueden ser unidas punta con punta, lo que nos permite que hagan un cierre en ángulo de 90 grados. No parece que el emplearlo en la muñeca sea los más cómodo, pero se agradece la originalidad de la propuesta al menos.
En la patente se menciona una alternativa o más bien una variante del terminal, que sería la posibilidad de una tablet plegable de hasta 7 pulgadas. Este terminal constaría de una posición totalmente desplegada para consumir contenido y que sea más cómoda de usar en casa y otra opción que nos permitiría recoger el terminal en un dispositivo más pequeño en el que ambas partes ofrecen pantalla.
Como todas las patentes, hay una alta posibilidad de que no la vemos convertida en una realidad ya que lo normal es que las compañías patenten ideas a modo de precaución por si en alguna ocasión consideran apostar por un determinado proyecto. Esta idea del terminal nos recuerda a la presentada por ZTE con su Axion M que en ese caso nos ofrecía dos pantallas plegables pero no flexibles, el terminal parece no haber triunfado por lo que teniendo en cuenta el año en el que se solicitó la patente quizá de aquellas pareciese buena idea pero ahora es poco viable.