¿Cómo lo ha logrado? Gracias a una colaboración con Nokia y Amazon Web Services (AWS), explorando nuevas formas de llevar la infraestructura de red a la nube.
¿Qué han hecho exactamente?
Telefónica ha probado la solución Cloud RAN de Nokia, que permite que partes de la red móvil funcionen sobre la infraestructura en la nube de AWS. Y no solo eso, sino que ha combinado lo mejor de ambos mundos: han usado tanto la nube pública (en el centro de datos de AWS en Aragón) como una nube privada en sus instalaciones de Madrid. En términos tecnológicos, es como si hubieran puesto la red móvil en un gimnasio para que gane músculo y flexibilidad al mismo tiempo.
¿Por qué esto es importante?
Hasta ahora, las redes móviles funcionaban principalmente con equipos físicos muy especializados. Con esta innovación, Telefónica se acerca a un futuro donde la red es más flexible, eficiente y fácil de gestionar. Imagina que tu operador pudiera actualizar o mejorar la red con la misma facilidad con la que se actualiza una app en tu móvil. Eso es lo que se busca con la "cloudificación" del 5G.
Además, este enfoque híbrido (nube pública + nube privada) permite colocar las distintas partes de la red donde mejor convenga según sus necesidades de velocidad y latencia. Para los usuarios, esto se traduce en una red más rápida y adaptable, especialmente en aplicaciones que requieren una respuesta en tiempo real, como el gaming en la nube o la realidad aumentada.
¿Quién se beneficia de esto?
Por ahora, esto es solo una prueba piloto. No significa que mañana vayas a ver un botón en tu móvil que diga "Activar 5G en la nube", pero es un primer paso importante. Afectará a:
- Usuarios finales: Aunque de forma indirecta, si esta tecnología se implementa, podríamos ver una mejora en la calidad del servicio, menor latencia y una red más eficiente.
- Empresas y desarrolladores: Un 5G más flexible podría impulsar nuevas aplicaciones y servicios que aprovechen una red más ágil y personalizable.
- Telefónica y otros operadores: Esta prueba les ayuda a explorar un modelo más escalable y rentable para desplegar el 5G, reduciendo costes y mejorando la operatividad.
¿Y ahora qué?
Telefónica, AWS y Nokia seguirán trabajando juntos para perfeccionar esta tecnología. La idea es simplificar la configuración y gestión de la red con soluciones basadas en inteligencia artificial y automatización, haciendo que todo sea más eficiente y menos dependiente de hardware específico.
En resumen: el 5G sigue evolucionando, y Telefónica quiere asegurarse de que su red esté preparada para el futuro. Puede que aún no lo notes en tu día a día, pero cuando tu juego online vaya como un tiro sin lag o las videollamadas sean más fluidas que nunca, recuerda que, en parte, es gracias a que el 5G está aprendiendo a vivir en la nube.