A la hora de montar un PC gamer, es muy importante tener en cuenta la elección de la CPU. Aunque parece que para montar un ordenador para juegos no es importante tener gráficos integrados en la CPU si vas a utilizar el ordenador principalmente para jugar, te equivocas. Nosotros, hemos cometido este error y en este artículo te explicamos por qué tu no debes instalar una CPU sin tarjeta gráfica.
Diferencia entre gráficos integrados y dedicados
Antes de entrar en los problemas de las CPU sin gráficos integrados, echemos un vistazo rápido a las diferencias entre los gráficos integrados y los dedicados. Existen dos tipos de gráficos en los ordenadores: los integrados y los dedicados. Los gráficos integrados se encuentran dentro de la CPU, mientras que los dedicados se conectan a través de un puerto PCIe en la placa base.
Los gráficos integrados son suficientes para tareas básicas como navegar por internet, ver vídeos o usar aplicaciones de ofimática. Sin embargo, para jugar a videojuegos de última generación o realizar tareas de edición de vídeo o diseño gráfico, una GPU puede ser un paso importante.
Por qué compré una CPU sin gráficos integrados
Compré un Ryzen 7 5700X simplemente porque coincidía con las especificaciones aproximadas que estaba buscando al construir una PC. Tenía una idea básica de lo que quería, incluida una CPU Ryzen 7, y el 5700X ofrecía velocidades suficientes. Más importante aún, los procesadores sin gráficos son más baratos, ya que normalmente son procesadores normales a los que se le desactivaron los gráficos debido a algún tipo de problema.
También me atrajeron las especificaciones del 5700X, que eran ligeramente mejores que las del Ryzen 7 5700G, que tiene gráficos integrados. Supuse que una GPU siempre estaría conectada ya que era una computadora para juegos y que tenía sentido optar por el aumento de rendimiento por pequeño que fuera.
Sin embargo, pronto descubrí que este aumento de rendimiento era imperceptible y que a cambio obtuve un montón de problemas, como los que muestro a continuación.
Razones por las que no debes instalar una CPU sin tarjeta gráfica
- No podrás utilizar el ordenador mientras esperas una GPU: Si se te estropea la GPU y no tienes una de repuesto, no podrás utilizar el ordenador hasta que la compres o repares la que se te ha estropeado. Sin embargo, si tienes una CPU con gráficos integrados, podrás seguir utilizando el ordenador para tareas básicas mientras esperas la nueva GPU.
- Es difícil diagnosticar problemas de la GPU: Si tienes problemas con la GPU, será mucho más difícil diagnosticarlos si no tienes una CPU con gráficos integrados. Esto se debe a que no podrás utilizar la pantalla para ver los errores o realizar pruebas.
- El rendimiento extra es mínimo: La diferencia de rendimiento entre una CPU con gráficos integrados y una sin ellos es mínima. En algunos casos, la diferencia puede ser de tan solo un 3%. Por lo tanto, no merece la pena sacrificar la flexibilidad de tener gráficos integrados por un rendimiento que apenas se nota.
- La diferencia de precio no es tanta: En general, las CPU sin gráficos integrados son más económicas. Pero la diferencia de precio entre una CPU con y sin gráficos integrados suele ser de menos de 50 euros.
Recomendaciones
Si estás pensando en comprar una nueva CPU para tu PC gamer, te recomendamos que optes por una CPU con gráficos integrados. De esta manera, podrás utilizar el ordenador para tareas básicas mientras esperas a comprar una GPU o si se te estropea la que tienes. Además, será mucho más fácil diagnosticar problemas de la GPU y el rendimiento extra que obtendrás no es significativo.
En definitiva, no vale la pena sacrificar la flexibilidad y la comodidad de tener gráficos integrados por un rendimiento extra que apenas se nota. Recuerda que siempre puedes comprar una GPU más adelante si lo necesitas.