A estas alturas, incluso si no eres usuario de Telegram conocerás su existencia. Es una de las apps de mensajería más populares junto a otras como WhatsApp o Signal. Su popularidad ha aumentado en más de una ocasión con la caída en desgracia de WhatsApp, ya fuese porque esta última dejaba de funcionar o porque introducía políticas de privacidad poco favorables para sus usuarios. Pues bien, desde 2020 ya se conocía la búsqueda de Telegram por introducir nuevas formas de financiación. Ahora, estas llegan en forma de suscripción premium.
Mediante un mensaje precisamente en su canal de Telegram, uno de los fundadores y CEO de Telegram ha introducido lo que podemos esperar que suceda el próximo mes con una nueva suscripción de pago. En su “artículo”, bastante extenso y a la vez sin aportar demasiada información, el CEO de Telegram habla de un nuevo plan de pago que desbloquee funciones avanzadas en la app de mensajería.
Si bien en más de una ocasión se ha especulado con cuáles podrían ser estas funciones, lo que se extrae de este nuevo documento es que estarán relacionadas con los límites que la app impone, tales como el tamaño de los archivos o los límites de usuarios en grupos. Durov afirma que si se desbloqueasen estas funciones de forma ilimitada como los usuarios solicitan, la plataforma no sería viable, los servidores colapsarían y se terminaría la plataforma para todos.
Funciones también gratuitas.
Al mismo tiempo que desde la compañía afirman que las funciones actuales de Telegram seguirán siendo gratuitas, también aseguran una cierta compatibilidad de los usuarios gratuitos con los usuarios premium. Si un usuario premium nos envía un archivo grande o un sticker “exclusivo” de los usuarios premium, como usuarios gratuitos igual podremos verlos.
¿Qué pasa con los anuncios en Telegram?
En el mismo comunicado, Durov afirma que los anuncios que la compañía ha introducido en los canales públicos han tenido un mayor éxito del que se esperaba. No obstante, también sostiene que la plataforma tiene que ser financiada por sus usuarios y no por los anunciantes, es decir, las funciones “premium” tienen que pesar más en la compañía que los ingresos provenientes de mostrar publicidad.